El ministro de Producción y Turismo, Juan José Bahillo se refirió a la reglamentación de la Ley de Emergencia Turística, el funcionamiento de las actividades económicas en Entre Ríos y la posibilidad de instalación de granjas porcinas chinas.
«El turismo fue la más golpeada de todas las actividades económicas, junto con el transporte interurbano y urbano de pasajeros», analizó el ministro de Gustavo Bordet en declaraciones al programa Día a Día de Canal 7 de Gigared.
Por otro lado, analizó que -en parte debido al perfil agroindustrial de la provincia-, «el resto de las actividades continuaron trabajando o se reanudaron progresivamete. A las industrias relacionadas con el mercado externo claramente les va mejor en comparación con aquellas que apuntan al consumidor interno. Todavía hay incertidumbre para la reactivación del consumo», sostuvo.
Ley de Emergencia Turística. Entre los principales puntos de la medida, enumeró: «Exime del 50% del Impuesto Inmobiliario a restaurantes y hoteles; Ingresos Brutos de julio, agosto y septiembre y prorroga los periodos de marzo abril y mayo. También se incluye a las empresas ligadas al turismo y prestadoras de servicios para el sector».
Temporada de verano. Sobre la posibilidad de recibir turistas en Entre Ríos durante la temporada estival, el funcionario fue cauto: «Es complejo porque la gente está con mucha angustia y preocupación, por lo tanto quiero ser muy prudente. No hay que ser dramático ni generar expectativas infundadas, más que nada porque somos una provincia receptiva de turistas, dependemos de otras partes del país. Por eso primero necesitamos que se recomponga el tránsito interprovincial, especialmente con el AMBA, Rosario, Córdoba y Uruguay. Mientras no se restablezca el normal tránsito cuesta reactivar el turismo», aseguró.
Granjas chinas. Sobre la posibilidad de instalación de granjas chinas para la producción porcina explicó que «se está trabajando a nivel de las cancillerías. Son inversiones interesantes que permiten generar valor, trasformar la proteína vegetal en animal. Es un modelo probado y eficiente», valoró.
No obstante, Bahillo remarcó las principales variantes que analizan: «Primero que el ingreso de estas inversiones no pongan en riesgo el desarrollo del sector porcino, que no afecte la provisión de insumos; el tema ambiental por los residuos que generan, aunque ya vendrían con un sistema de tratamientos de afluentes líquidos y sólidos. Por otro lado hay una sana preocupación porque nuestro estatus sanitario es muy bueno y esto podría traer complicaciones, pero en principio no se importarían madres, es decir, se haría con cernas nacidas en el país», dijo.
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