Recientemente en General Ramírez se concretó la compra de 23 hectáreas para ampliación del Área Industrial.
La compra se realizó mediante un préstamo del Banco de Entre Ríos, «por un monto de $ 8.000.000 a pagar en 60 cuotas mensuales con 12 meses de gracia para el pago de capital. La tasa pactada es variable, BADLAR + 4,5%», informaron desde el municipio en un texto enviado a IN.
La adquisición es resultado de una serie de acciones que incluyeron reuniones con el banco, empresarios locales, funcionarios provinciales y nacionales, además de la dificultosa búsqueda de antecedentes en los archivos municipales.
Entre la documentación recuperada se destaca un estudio técnico realizado en 1992 por el Consejo Federal de Inversiones (CFI) y compilado en cuatro tomos. Uno de ellos -el que refiere al impacto ambiental- apareció en octubre de este año.
Próximos pasos
La compra permite reactivar un expediente iniciado hace tiempo ante el gobierno provincial, por el cual se tramita el reconocimiento como Parque Industrial.
En los últimos días, representantes del municipio mantuvieron reuniones con la Dirección General de Industrias y Parques Industriales de Entre Ríos. «Todo indica que el proyecto está bien encaminado. De acuerdo con el organismo, el informe de CFI cumpliría con las exigencias normativas y técnicas, lo que significa un importante ahorro de recursos, tanto por el valor de los estudios como por el tiempo que demandan», valoraron.
Las ventajas de pasar de Área a Parque Industrial
Alcanzar la condición de Parque Industrial implica que las empresas cuenten con servicios comunes tales como captación y distribución de agua, sala de primeros auxilios, servicios bancarios, correos, comunicaciones, entre otros. También se exige que los parques tengan tratamientos comunes de sus afluentes que son altamente contaminantes, a través de la ley 6260, que establece controles para preservar el medio ambiente.
Un Parque Industrial debe contar, además, con un reglamento interno y un ente administrador que puede ser de carácter municipal, privado o mixto. Otros beneficios, son la posibilidad de contar con fondos para el desarrollo de la infraestructura del parque que ya se están gestionando ante el gobierno nacional; y la existencia de promociones impositivas para las empresas, tales como reducción de impuestos provinciales.
«Actualmente estamos trabajando en el diseño jurídico de la administración del parque industrial, tarea que se espera finalizar durante el primer trimestre de 2018», concluye el comunicado.
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