La Selección derrotó 2-1 a los trasandinos, defensores del título, con goles de Di María y Banega, ambos en el inicio del complemento. Sobre el final descontó Fuenzalida tras una mala salida de Romero. Messi no jugó pero alentó desde el banco.
La Selección comenzó su camino hacia el sueño americano: en su debut en la Copa América que se celebra en los Estados Unidos le ganó 2-1 a Chile, el vigente campeón, con goles de Ángel Di María y Ever Banega y una actuación convincente, ordenada y sin su máximo pilar, Lionel Messi.
Las jugadas de los goles fueron casi calcadas: a los 5 minutos Banega se apoderó de una pelota en el medio, corrió rumbo al arco y en el momento preciso soltó un pase a la izquierda que encontró a Di María entrando al área para definir entre el arquero Claudio Bravo y el palo.
Así, en apenas un puñado de minutos, el equipo argentino lograba confirmar lo que había merecido en un primer tiempo donde contó con más y mejores opciones que Chile, pero sin poder confirmarlo en el marcador.
Todo a instancias de Lionel Messi, el espectador de lujo del partido que, sentado en el banco de suplentes ante su imposibilidad de jugar por una dolencia lumbar, alentó como el mas fanáticos cada movimiento de sus compañeros.
Apenas siete minutos después del gol de Di María, la misma jugada terminó en el segundo tanto de la Selección, esta vez conFideo como conductor de la jugada que encontró a Banega, antes asistente, ahora como definidor para el 2-0 que también se metió entre el palo y el arquero.
Argentina muestra una buena imagen, solidez en sus lineas más allá de alguna peligrosa imperfección en defensa que pudo haber terminado en gol de Alexis Sánchez en la parte inicial, después de un fallo de Ramiro Funes Mori que le permitió al delantero del Arsenal de Inglaterra quedar mano a mano con Sergio Romero, de gran reacción para evitar el tanto de los trasandinos.
• Se viene México
De momento Argentina y Chile son favoritos en los papeles, mientras que México, con un sólido triunfo 3-1 ante Uruguay, ya empieza a perfilarse como candidato con hechos concretos.
Buena circulación de balón y precisión en velocidad fueron los atributos del Tricolor, que ganó los ocho partidos que jugó desde que el colombiano Juan Carlos Osorio comanda el plantel azteca.
Uruguay en cambio, sin su figura Luis Suárez, mostró una buena reacción en la segunda parte tras ser apabullado por México en el inicio, pero no le alcanzó para dar vuelta la historia.
México y Colombia, que en el partido inaugural derrotó 2-0 con autoridad al anfitrión Estados Unidos, se presentaron en el torneo como los seleccionados más sólidos hasta ahora y sobresaliendo en un nivel bastante discreto de los otros representativos que ya debutaron. (PlayFútbol)
COMENTÁ LA NOTA